Reconocimiento del Peronismo 26 de Julio a Carlos “El Indio” Vázquez.
“La lealtad es cosa de la que todo el mundo habla y muy pocos la practican, por la sencilla razón de que no es un posición espiritual”. Las palabras ya conocidas son de Ramón Carrillo, quien está diciendo (casi sin decir) que a la lealtad hay que ponerle el cuerpo además de la saliva. El doctor, entonces, está ponderando a personas como Carlos Vázquez, a quien desde el Partido Justicialista local y la Agrupación Peronismo 26 de Julio se lo recordó especialmente ayer, en el marco de la celebración conjunta de la Semana de la Lealtad Peronista.
En la que fuera su casa de calle Yrigoyen en Villa Fidelidad -la casa de “El Carlos” o “El Indio”-, la amplia familia (con Moni, su esposa, y sus hijxs como anfitriones directos) recibió a vecinxs, militantes, Joaquín Propato, presidente del PJ local; Nelson Sombra, candidato a intendente por el Frente de Todos, y a Julio Varela, con quien Carlos militara en el peronismo, compartiendo muchísimas experiencias relacionadas con la acción política.
“No venimos a deprimirnos”, dijo Varela y precisamente la actividad propuso otro espíritu, de la misma manera que se hará en el caso de otras visitas previstas durante los próximos días a hogares de hombres y mujeres que a sola mención convocan a la memoria algún suceso peronista en esta ciudad. Distintas rondas de mate, platos con tortas y masitas y mucha emoción sazonándolo todo.
“Para nosotros, los compañeros importantes van más allá de los cargos que puedan llegar a ocupar en su vida militante; son los compañeros y las compañeras que a veces dejan de lado la familia para poner el cuerpo a una causa que es la causa más noble que hay, la del peronismo”, expresó Gonzalo Rodríguez en el comienzo.
Con doble motivo para el peronismo vernáculo, octubre se oscureció con dañina negritud hace 9 años. Carlos Vázquez fallecía en un accidente de tránsito el 26 de octubre, pocas horas antes de que muriera Néstor Kirchner. Militante peronista desde la década del 70, Vázquez se incorporó -en la década del 90- a la militancia de Peronismo 26 de Julio, leal a sus declamados principios justicialistas (nos queda hoy enhebrar supuestos acerca de cómo hubiera caracterizado Carlos tanto travestismo político en todos los niveles de gobierno). Vázquez conoció a Cacho Scarpati, el fundador de la Agrupación 26 de Julio, a quien alguna vez convocó a conocer las instalaciones de su querido Estrellas de Juventud. Devino en autodidacta y un emprendedor nato en el plano laboral, dedicándose a la construcción de viviendas rurales y accesorios para las tareas del campo. “Carlos también fue el mayor contribuyente de 2010”, acotó Mónica, con risa tímida, y se llevó una ovación.
Fue Julio Varela el encargado de reflexionar acerca del concepto de lealtad, de cómo aplica la lealtad en la militancia diaria, además de relatar algunas vivencias simpáticas junto a Carlos Vázquez y ponderar por qué la casa familiar sigue siendo un símbolo de la quintaesencia peronista. A continuación, pequeños extractos de sus dichos:
-“Las casas eran prácticamente el lugar de todas las actividades de la militancia. Algunas fueron unidades básicas, salas de primeros auxilios, fue el lugar donde se cocinaba la política. En las casas se escuchaban las cintas del General”.
-“Cuando se vino la represión, las casas fueron los refugios donde los compañeros protegían a los compañeros perseguidos. Esto no es un tema menor, sólo los que lo vivieron lo pueden contar”.
-“A veces se habla de militancia y su formación. Esto es formación: contarle las vivencias de los compañeros, como en este caso, la vida de Carlos”.
-“La muerte de Carlos es (y lo sigue siendo) un vacío irreparable para su familia, pero también para los lugares donde él se movía: la agrupación, el Club Estrellas, el club de sus amores, ya no fueron lo mismo. Porque Carlos era todoterreno”.
-“Ejemplos de vida como el de Carlos son formativos. Tuvo una participación dentro del peronismo y hoy hubiera sido una persona indispensable”.